miércoles, 11 de noviembre de 2009

El cambio global en las Zonas áridas.

Los indicadores para el seguimiento de los efectos del cambio global en zonas áridas forman parte de los estudios que actualmente está haciendo el Centro Andaluz para la Evaluación y Seguimiento del Cambio Global (CAECG). Se trata de un centro que se enmarca en el convenio de la Junta de Andalucía para crear la Fundación Patrimonio Natural, Biodiversidad y Cambio Global. Su director es Herelindo Castro Nogueira, doctor en Ciencias Biológicas y profesor titular de Ecología en la Universidad de Almería (UAL), que recientemente ha sido de los galardonados con el Premio Duna 2009, otorgado por el Grupo Ecologista Mediterráneo, del que se muestra "encantado" por su concesión.
El diseño experimental de indicadores para el seguimiento de los efectos del cambio global en zonas áridas y seiáridas del levante andaluz se denomina Glocharid (Global Change Aird Zones) en el que trabajan 40 investigadores aproximadamente.
La primera fase del proyecto consiste en aglutinar y adornar toda información climatológica de organismos e instituciones existentes pero que está dispersa. "Vamos a colocar en la provincia cuatro estaciones multiparamétricas (que van a medir más 20 variables como humedad, vegetación o la presión), tres torres de eddy-covarianza unos sofisticados equipos que detectan y miden el balance del carbono entre el suelo, la vegetación y la atmósfera.
Estos equipos de medición ya están instalados en Sierra Nevada y los datos que actualmente obtienen serían completados con los resultados de los mediadores de la provincia de Almería.
Los contrastes entre las dos zonas donde están instalados los mediadores lo explica el director del CAESCG:"Cabo de Gata es el sótano y el veleta, en Sierra Nevada, es el último piso a nivel climátivo para medir los balances y de carbono y el vapor de agua. Tenemos que estudiar muy bien en qué punto exacto instalamos esos aparatos". Este proceso es a corto plazo porque en enero ya se trendrían los primeros resultados y se pondria en marcha la gestión de los mismos.
El CAESCS tiene cinco proyectos. Uno de ellos es el control del microclima en cavidades en yeso, espelotermas y calizas "ya que sólo les afectan los cambios más fuertes es como el café dentro de un termo". Son unos ecosistemas maravillosos para estudiar los cambios climáticos ya que el carbono es el personaje protagonista de una formación estalactita y podemos, siguiendo su historia, conocer la historia del carbono en el agua".